Egipto. Crucero, Poblado Nubio, El Cairo

Día 8

Nuestras visitas por los templos ya habían acabado, habíamos visto lo más importante de las orillas del Nilo, y hoy teníamos la mañana libre.

Sin embargo, lejos de quedarnos apalancadas en el barco como muchos otros, contratamos la excursión al poblado nubio.

En esta salida, primero nos embarcaban en una faluca y navegábamos durante una media hora, admirando las diferentes mezquitas que sobresalían en las orillas del Nilo, hasta llegar al desierto donde nos esperaban los camellos.

Los camellos iban contigo encima y con su dueño al lado cogiéndole las riendas, pero los más atrevidos les pedimos que nos dejaran sueltos y que le azotaran para que corrieran porque iban más lentos que la ostia, y pa que le dijimos na, empezaron a trotar de una manera que pensaba que al final me daría de bocas contra el suelo, pero me lo pasé genial!!

El trayecto en camello acababa en el poblado nubio, al que ibamos a visitar y conocer sus costumbres.

Nos llevaron a una escuela en la que nos dieron unas pequeñas clases del afabeto árabe, echamos unas buenas risas también ahí!!

Luego fuimos a una casa muy bonita para que nos hicieran unos tatoos de henna, y cada uno escogió el modelo y el sitio donde lo quería, aunque la henna no era muy buena ya que a los dos días en vez de un tatoo tenía un borrón en el cuello.

Cogimos de nuevo la faluca para volver a la motonave,ya que teníamos que recoger la maleta cagando leches para ir al aeropuerto a coger el vuelo al Cairo.

El trayecto creo que fue una hora y pico, y se hizo muy agradable, sobretodo conforme vas llegando al Cairo y vas viendo la cantidad de mezquitas que hay todas iluminadas, y la ciudad así como toda apelotonada, era...diferente.

Nuestro hotel en el cairo era el Movenpick Piramids, pero al llegar al aeropuerto nos dicen que nos suben la categoría y que nos llevan al Meridien Piramids de 5 estrellas, estupendo!!!!!!!!!!!!

El hotel estaba al lado de las pirámides, y cuando llegamos y las vimos al fondo iluminadas flipamos, que pasada.....alucinante, sin palabras.

Recuerdo que nos fuimos a un Take Away a comernos un kebap, y nos sentamos en una parada de autobús delante de las pirámides y allí estuvimos un rato largo, sin cansarnos de mirarlas....

Luego investigamos un poco la zona, en la que la verdad no había mucho por ver ni por hacer, y nos fuimos a descansar en nuestro nuevo hotelazo.



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